
Por
eso, la primera y más importante labor de Cáritas es: vivir el amor a todas las
personas, crear buen rollo entre todos, no criticar, apoyar, animar,
acompañar en las situaciones alegres y
en las tristes…
Luego
es compartir: lo que somos y tenemos. Todo es un regalo e intentamos que llegue
a quienes lo necesitan.
En
nuestro pueblo, ¿qué podemos hacer?:
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Conocer
el evangelio: los hechos y dichos de Jesús para vivirlos con Él hacía con todas
las personas.
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Acompañar
y apoyar a las personas más empobrecidas, necesitadas de cariño, compañía,
trabajo, familia, lenguaje, comida, dinero.
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Animar
el pueblo para ser todo lo posible comunidad: hacer pueblo, hacer comunidad,
fomentar la unión, actividades tales como comidas, excursiones, charlas,…
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Apoyar
la promoción, el desarrollo en comunidad, con asociaciones, cooperativas,
grupos…que crean unión y mueven el pueblo. Y promover la unión entre todas las
asociaciones.
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Darnos
cuenta de que si aquí no hay pobres de dinero, puede haber otras pobrezas:
cultura, falta de opinión, de diálogo, desavenencias, soledad, enfermedad,
ancianidad…
TODO ESTO LO PODEMOS ANIMAR DESDE CARITAS.