domingo, 16 de enero de 2011

El arca de Noe

Dice el relato mítico que ante el diluvio que iba a venir, Noe prepara una arca donde meterse él, su familia y representantes de todos los animales.

Pues yo ya estoy pensando en el diluvio que nos viene encima: la propaganda de las elecciones. Nos lloverán cartas, correos electrónicos, carteles, muchos carteles, cuñas de radio, spot de tele…mítines..

Me permito varias sugerencias:

Lo principal de todo es que conozcamos las propuestas de cada partido y las estudiemos. Así que nos den de una forma corta, veraz, breve los planteamientos de cada uno

Pienso que los carteles no mueven a nadie a votar en uno u otro sentido. Pienso que muy poquitas personas se paran a ver el cartel y a estudiarlo. Yo los suprimiría

Es importante aprovechar las elecciones para hacer personas. Que nos ayuden no a conseguir votos, sino a formarnos una opinión, a contar con nuestras ideas, a hacer pueblo.

Que nunca nos hablen mal de los “otros” sino que expongan claramente su propuesta

Que se aprovechen los medios de comunicación en plan de exponer, dialogar, enriquecer los pareceres. Los juicios de personas no nos interesan. Cada ciudadano-a los conocemos y vemos su idoneidad.

No se trata de ganar o perder. Ese lenguaje es pernicioso. Se trata de mejorar la situación

Si veo que las cosas no van por ahí, me construiré mi arca para no dejarme seducir y arrastrar por la propaganda. E invito a los que quieran a juntarnos para poder subsistir y hacer un estudio serio de las propuestas electorales. Así, salvaremos por lo menos algunos árboles con el no uso del papel y sobre todo algunas personas: seguiremos siendo personas conscientes, libres y responsables. Antes de que el diluvio de la propaganda nos inunde.

Algo más que caracoles



De siempre he visto que hay algunas personas que recogen caracoles y luego los venden. Así sacan sus buenos euros. Ya sé que por ahí no va economía. Pero sí que sufro cuando veo algunas alternativas que quizás en mi ingenuidad creo que pudieran aportar algunos puestos de trabajo y alguna riqueza. Y sobre todo, un camino a recorrer
Son pequeñas cosas. Las orillas del Ebro, en algunos tramos están muy abandonadas y llenas de árboles secos, unos cayéndose y otros caídos. ¿No podría ser una buena fuente de trabajo? ¿Y esa madera no sirve para nada? ¿No merece la pena limpiar los ríos?

También veo, paseando por muchas zonas de la Rioja, fincas sin labrar. Entiendo que tal como están los precios de los productos, no merece la pena a veces, sembrar. Pero, pensando en algo más sencillo, ¿no podrían varias familias ocupar el tiempo y sacar algunos productos para comer y quizás para vender? Además, lo más interesante sería que están ocupados y un poco ilusionados.

Un tercer yacimiento de trabajo, ya mil veces comentado, son los montes: plantarlos de árboles. Tenemos mucho terreno lleco y mucha variedad de árboles que pueden ser más o menos apropiados para cada lugar. Esto da una riqueza al medio ambiente y puede ser más tarde, rentable.

Es sorprendente cómo se busca la chatarra, e incluso la abundancia de robos que hay en los metales. ¿No puede haber una fuente de ingresos en la siembra y recogida de hierbas medicinales? ( Por desgracia a veces ya la hay en marihuana…)

Sin duda que cada persona tenemos algunas alternativas. Pongámoslas en común.

Me parece fatal que se quiten los 426 euros a las familias sin recursos. Pero se debería dar ese sueldo y a la vez apoyar que esas personas paradas desarrollen algún trabajo en alguno de estos u otros campos. Hoy hay que darles la pesca... Pero mientras, enseñando a pescar