martes, 13 de mayo de 2014

UNA MIRADA AL MUNDO SI EL MUNDO FUERA UNA ALDEA DE 100 PERSONAS

- Habría 48 varones y 52 mujeres.
- 86 sabrían leer y escribir, 14 no.
- 70 serían de color, 30 serían blancos.
- 70 adultos, 30 niños.
- 61 asiáticos, 12 europeos, 13 latinoamericanos, 13 americanos y 1 de Oceanía.
- 17 hablarían chino, 9 inglés, 8 hindú, 6 castellano, 6 ruso, 4 árabe y 50 otras lenguas.
- 1 persona tendría título universitario, los otros 99 no.
- 76 carecen de electricidad mientras que 24 sí que tendrían.
- 48 personas no tienen suficiente libertad para expresarse mientras que 52 sí la tienen.
- 2 personas nacen por cada una que muere.

- 20 viven acobardados por guerras mientras que 80 no padecen este sufrimiento.
- 83 tendrían acceso a agua potable, 17 no.
- 6 (todos de EEUU) poseerían el 59% de la riqueza total, 74 poseerían el 29% y el resto de la riqueza, un 2%, se repartiría entre 20 personas.
- 50 padecen hambre, 20 desnutridos, 1 muere de inanición, 30 siempre tienen suficiente para comer, 15 tienen sobrepeso.
- 7 tienen ordenador, 93 no tienen.
- 33 serían cristianos, 19 musulmanes, 13 hindúes, 6 budistas, 5 espiritistas y 24 adorarían a otros dioses o serían ateos.
- 1 infectado de SIDA, 99 sanos.
- 20 personas consumirían el 80% de los recursos energéticos, las otras 80 personas se deberían conformar con el 20%.
- 68 viven en una atmósfera limpia mientras que 32 viven en contacto con aire contaminado.
- ¿Tienes comida en tu nevera? ¿tu ropa en un armario? ¿una cama en que dormir? ¿un techo sobre tu cabeza?.. entonces eres más rico que el 75%.
- Si tienes una cuenta en el banco eres de las 30 más ricas, pues 18 luchan por sobrevivir con 1 euro al día y 53 luchan por sobrevivir con 2 euros.
Un aguador de la India tenía sólo dos grandes vasijas que colgaba en los extremos de un palo y que llevaba sobre los hombros. Una tenía varias grietas por las que se escapaba el agua, de modo que al final de camino sólo conservaba la mitad, mientras que la otra era perfecta y mantenía intacto su contenido. Esto sucedía diariamente
La vasija sin grietas estaba muy orgullosa de sus logros pues se sabía idónea para los fines para los que fue creada. Pero la pobre vasija agrietada estaba avergonzada de su propia imperfección y de no poder cumplir correctamente su cometido. Así que al cabo de dos años le dijo al aguador:

-Estoy avergonzada y me quiero disculpar contigo porque debido a mis grietas sólo obtienes la mitad del valor que deberías recibir por tu trabajo.
El aguador le contestó:
-Cuando regresemos a casa quiero que notes las bellísimas flores que crecen a lo largo del camino.
Así lo hizo la tinaja y, en efecto, vio muchísimas flores hermosas a lo largo de la vereda; pero siguió sintiéndose apenada porque al final sólo guardaba dentro de sí la mitad del agua del principio.
El aguador le dijo entonces:

-¿Te diste cuenta de que las flores sólo crecen en tu lado del camino? Quise sacar el lado positivo de tus grietas y sembré semillas de flores. Todos los días las has regado y durante dos años yo he podido recogerlas. Si no fueras exactamente como eres, con tu capacidad y tus limitaciones, no hubiera sido posible crear esa belleza. Todos somos vasijas agrietadas por alguna parte, pero siempre existe la posibilidad de aprovechar las grietas para obtener buenos resultados.

Escuchar y opinar

¿Os imagináis que uno de un partido político pronuncie un mitin apoyando al partido contrario? ¿Que un musulmán predicase un día en la misa del pueblo? ¿Que un ateo tratase de decirnos sus ideas a los creyentes? ¿Que un cristiano predicase a los budistas? ¿Los del Barça que aplaudiesen y alabasen al Madrid y a la inversa?

No es el mundo al revés. Sino un ejercicio que sería muy sabio: normalmente predicamos a los que ya creen, en los mítines están las personas que ya son de ese partido,…
Si somos honestos, no sería ningún disparate. Porque veríamos hasta qué punto estamos convencidos, hasta qué punto asumimos la parte de verdad que veamos en los demás, hasta qué punto nos ayuda a reflexionar y mejorar nuestros planteamientos.
Lo peor es creernos en la total, única y absoluta verdad. Porque nos privamos de la parte de verdad que tienen los demás.
Es importante profundizar en nuestras razones y escuchar las razones de los demás. Nadie tiene él solo la verdad plena.  Hay que asumir la verdad que cada uno tiene.
La sociedad hoy es muy plural. Cada uno pensamos que lo nuestro es lo mejor y lo único bueno. Por supuesto que sí creemos en Alguien, si somos cristianos es porque nos convence y nos entusiasma Jesucristo. Pero profundizar con humildad; buscar cada día la Verdad, eso nos hace más libres.
Pasar de una fe de rutina a un convencimiento propio, vivido, decidido y con humildad.

De pueblo

Y a mucha honra. Somos de pueblo. El día 15 celebramos la fiesta de San Isidro Labrador, patrono del mundo rural.
Traigo los datos del periódico  sobre nuestros tres pueblos:
Pazuengos: Habitantes censados: 34
Menores 18 años: 0
Mayores de 65: 16. Supone el 47,1%.
Santurde : Censados: 300
Menores de 18 años: 36.  Un 12 %
Mayores de 65: 90. Un 30%
Santurdejo: Censados: 134
Menores de 18: 4. Un 4%
Mayores de 65 años:  67. Un 50%


Son datos. ¿Qué nos parecen? ¿Qué pensamos?

Es cierto que los tres pueblos se duplican y triplican en fines de semana y vacaciones. ¿Es ese el futuro del pueblo?
Ojalá seamos capaces de plantear nuestro futuro y decidir entre todos qué pueblos queremos de cara al futuro. Y trabajemos por  cimentar ese futuro.
Me parece muy interesante:
-          El no perder nuestras raíces históricas, culturales, humanas, económicas, religiosas.
-          El acoger y enriquecernos con lo que nos aportan los vecinos de fin de semana y vivir la experiencia preciosa de comunidad  en un pueblo.
-          Apoyar para que no cesen ninguno de los servicios que tenemos: sanitarios, educativos, religiosos, culturales, musicales, organizativos, sociales…
Mi correo es: gerardovillarperez@gmail.com
Mis teléfonos: 638 12 33 33 / 941 42 67 36
 
Ir creando algunos puestos de trabajo, sobre todo relacionados con lo que somos y tenemos en nuestra naturaleza.