Sí es verdad que vienen los Reyes, cuando nuestros niños reciben regalos el 6 de enero
Pero también es verdad que se alegran ese día, cuando yo me acuerdo de tantísimos niños que no recibirán nada.
Sí es verdad que vienen los Reyes cerca de los mayores cuando visitamos a un enfermo
Pero también es verdad que se alegran cuando le pedimos a Dios por tantos enfermos que nadie visita
Sí es verdad que vienen los Reyes cuando consolamos a un anciano o le atendemos si está solo; también cuando aportamos a Caritas ,o a otras Instituciones, comida para quien no la tiene, o cuando vienen cerca de nosotros personas o familias que en su país no pueden vivir y les aceptamos con naturalizad.
También es verdad que sonríen y se alegran los Reyes, cuando aportamos algún dinero a nuestra Parroquia al pasar la cesta en misa, pero se quedan sorprendidos cuando aportamos una moneda insignificante.
Pero sobre todo, llegan los Reyes para nosotros cuando nuestra aportación hacia ese niño, a ese anciano, a ese enfermo, a esa institución, a ese emigrante, la hacemos con cariño, con amor y aportando no de lo que nos sobra, sino de lo que tenemos para nosotros. Y es que entonces la alegría de los Reyes es algo de la gran alegría de Dios
(Chomin )
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