Quizás cuando hablamos de infancia misionera, nos viene enseguida a la mente el recuerdo de unos niños pidiendo con huchas para los “chinitos pobres ”.
La cosa es mucho más seria y profunda. En principio está la pregunta para todos nosotros: El ser cristianos ¿nos trae alegría, nos trae salvación, sentido? Nuestra vida ¿sería distinta si no fuésemos cristianos?
¿Qué entiendo por ser cristiano?
A. Conocer vitalmente a Jesús de Nazaret y: su vida, su mensaje, su presencia hoy, aquí y ahora .
B. Celebrar, contemplar, orar su vida y nuestra vida desde esa alegría que nos trae El.
C.- Vivir un estilo de vida con amor, perdón, entrega, servicio, sentido, esperanza…
Si somos así cristianos y eso nos trae alegría a nuestra vida, queremos compartirla con todas las personas posibles del mundo. Y descubrir a Jesús presente en cada persona de cualquier rincón del mundo. Y eso me va a llevar a aprender de ellos y a descubrir sus muchas cosas positivas .Y a la vez me va a animar a compartir con las demás personas lo que yo tengo: tiempo, alegrías, motivos de esperanza, posesiones, dinero, ideas…
Esto es lo que hoy nos quiere decir la “Infancia misionera”.Que los niños , ya desde su edad y su experiencia, tratan de conocer, aprender, compartir con los demás niños del mundo. Especialmente con los que más necesitan
Y sobre todo, vivir juntos como amigos de Jesús de Nazaret vivo hoy .
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