domingo, 30 de agosto de 2015

¿Qué ha cambiado, qué es lo que queda?

Muchas cosas han cambiado en nuestro mundo y en nuestro modo de vivir y de creer. Y otras muchas siguen, aunque de otra forma.
Lo que más se nota: que antes íbamos al templo y ahora la asistencia es muy pequeña.
Pero en pequeño grupo que intenta descubrir el nuevo rostro del Evangelio:
1. Ha cambiado nuestra idea de Dios: antes tan justiciero, tan fiscalizador. Ahora, Padre, más cercano, más apoyo, más en la vida.
2. Nuestra idea de Iglesia: antes tan de los de arriba, tan poco cercana al pueblo. Ahora de todos, porque todos somos importantes.
3. Nuestra manera de vivir la fe: antes cada uno individualmente, tan cerrada. Ahora con una forma más participativa.
4. Antes una fe del carbonero. Lo que nos habían dicho. Ahora más crítica, más formada, con interrogantes, de más sentido común.
5. Antes, confesarse daba miedo, era duro, para ponerse a bien con Dios. Ahora más gozosa, más liberadora. Para ponerse a bien con el hermano
6. La misa antes era obligatoria, en latín. Ritual, no se entendía, no se comulgaba. Ahora más participativa, todos celebramos, importancia de la Palabra, de la comunión, de la comunidad, abierta a las necesidades y problemas de la vida.
7. Antes era repetir y decir muchas oraciones. Ahora escuchar a Dios en nosotros y en la vida.
8. Antes, mucha atención al tema sexual, ahora a toda la persona, a los más pobres.
(Sacado de Fidel Aizpurua)

No hay comentarios:

Publicar un comentario